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8 Como sabrán, España se encuentra en el culo del mundo si hablamos en infraestructura de comunicaciones (claro, sin contar con los países que ni siquiera entran en este estudio por no tener ni un par de postes de teléfono). Durante años hemos sufrido el monopolio de una compañía subvencionada por el estado, que acabo siendo privada manteniendo el control de todas las líneas telefónicas. Como es política del blog, no mencionare su nombre aunque todos sabemos de quien se trata. Durante este tiempo imperialista, el dinero que entraba en las arcas de la compañía en cuestión no se invertía en mejorar la calidad del servicio, sino en engrosar las cuentas de sus dirigentes y algún politicucho con acciones.

Cuando empezaron a prohibirse los monopolios, en España se tardó una eternidad en que apareciera una compañía que se atreviera a meterse con la reina gorda dictadora. Y no solo eso, sino que aun, a dia de hoy, no tienen ninguna facilidad ni igualdad de condiciones para enfrentarse a ella.

¿Quién es el culpable de esta situación? Todos los implicados en ella, desde la reina gorda por su maldad, hasta la competencia por su falta de profesionalidad (siendo francos, los servicios que ofrecen son mas un problema que una solución), pasando por un gobierno que mira sin hacer nada, simplemente abriendo el bolsillo al mejor postor (no olvidemos que esta reinona paga muchas de las carreras políticas de nuestros dirigentes). ¿Y quien sufre las consecuencias? Nosotros, el usuario final. Por poner un ejemplo, en conexión a Internet con ADSL, Japón tiene un ancho de banda de 61 Mbps, mientras aquí vamos a ver ahora los 3Mbps (si, por que hasta ahora nuestra velocidad media es de 1,2 Mbps, nada que ver con los 20 que anuncian). ¿Alguien imagina la mula con 61Mbps?

Pues bien, en estos días sale la noticia, que después de cinco años de investigación, la Unión Europea va a multar a la reina gorda con 152 millones de euros por un abuso muy grave de su posición dominante en el mercado. Algunos, aplauden después de años denunciando ante la oficina del consumidor el penoso servicio de Internet que llega a su casa. Otros tiemblan, tiemblan por que hay que recordar que muchas familias comen o comieron gracias a la reinona y son fieles a sus colores, y temen que sus empleos se vean en peligro (lógico, después de ver una y otra vez como las grandes compañías despiden a sus plantillas para ahorrar). A mí esta multa me parece interesante siempre en cuando ayude a mejorar las comunicaciones españolas, pero surgen varias preguntas cuan lo menos espeluznantes: ¿Quién va a pagar esos millones? ¿Nosotros con más impuestos? ¿Los trabajadores de la compañía quedándose en el paro? Tendremos que estar atentos a la factura del teléfono. Pero tengo más preguntas ¿Dónde irá a parar ese dinero? Ya que esos millones son fruto de los abusos que hemos sufrido nosotros, deberían de servir para apaliar los agravios que hemos acumulado durante tantos años. ¿Y por qué ahora? ¿Tanto están llorando las otras compañías? Y la última y para mi más acojonante ¿Por qué esta multa la pone la Unión Europea y no el gobierno español? ¿Son ciegos ante estos abusos o solo con el terrorismo se ganan las elecciones? No solo hablo del actual gobierno, ya que la reinona fue fundada en 1924.

Concluyendo, la guerra esta servida, y como en toda guerra habrá víctimas inocentes. Solo esperemos que los vencidos no seamos los consumidores…

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